martes, 17 de julio de 2018

La Fe de mi calle

-Ay dios mio!! Todo está perdido, se me va, no sé que hacer... Es una gran parte de mi corazón, ayúdame, haz lo que quieras de mi.

Sin mediar palabra se levantó de la butaca, azul, incómoda y le besó su frente. Avanzó un largo pasillo y bajo unos 7 pisos hacia la calle. Comenzó a andar triste, compungido, acabado, roto por el dolor.

Aún tenía una milésima de fe y le quedaba sólo saltarse un último escalón. La gente lo miraba por la calle -pobre chico, qué le pasará. Así, atravesó un arco dispuesto a todo, a agotar los últimos recursos, jamás perdió la esperanza.

Delicadamente fue despegando uno a uno esos 5 cristales cuales 5 llagas, aprovechando la soledad.

El revuelo se desató al día siguiente, periódicos, telediarios,... no estamos acostumbrados a eso.

- Hola cariño.

Del bolsillo derecho de su pantalón, sacó un pañuelo de tela con delicadeza, el cual sin abrir y con la misma que lo sacó de si bolsillo colocó bajo una almohada.

Días más tarde con aún más desesperación volvió a levantarse y toscamente quitó el pañuelo que con delicadeza puso bajo su cabeza.

-Hola mi amor... (tose)

No hizo falta mediar palabra, un simple beso hizo sus lágrimas de cristal...

sábado, 30 de junio de 2018

Los vagabundos de mi calle.

Andando, sin mirar atrás, zapatos rotos y los pies ensangrentados.. gritando desde el corazón:

-¿Dónde estás Mamá? Qué hice para que no me ayudaras, para verme llegar aquí...

-¿Dónde estás Papá? Sólo un cartón de vino me sostiene... ¿Qué hiciste de mi?.
Las cosas no me vinieron bien, me quedé en la calle, esta es muy dura.

Y andando, agonizando por un vaso de agua, ver a esa gente pudiendo mantener una conversación.

- ¿Cómo estás?

- (Me derrumbo, quiero tener esa oportunidad, dame cobijo) bien, la calle es dura pero sigo adelante...

- ¿Qué tal esa herida?

- (Fatal, sólo necesitaba descansar en una cama y con un cuidado, poco a poco va a peor y no tiene buen color) va mejor, que caída más tonta fué.

- ¿Le importa mucho la conversación?, ¡vayase de aquí! ¡deje de mirarnos, no le voy a dar nada!

Qué bonito fue por un momento sentir cercanía...

Continúo el camino entre pensamiento y vino. La felicidad inunda mi cuerpo y poco a poco voy agotando las pocas fuerzas que me quedan.

Sigo recorriendo una calle interminable que me va poniendo una y otra piedra y los pies más duelen pero..., de repente, algo a lo que no acostumbro se cruza en mi pobre y nublada vista, es una luz. Fui cómplice de la vida y sentí aprobación, nobleza, pureza... Sentí que la sociedad estaba en paz conmigo, no me juzgaban por mis vestiduras y mi cartón de vino, quiso sentirme avanzando hacia mi... en ese momento sentí algo que alguna vez álguien sintiera conmigo.

Un pequeño cuerpo, una pequeña cara y una pequeña ternura que para fue el sol mas reluciente del mundo.

Avanzó titubeando, canalla, y como si de una reverencia se tratará encontré en él el cobijo que estuve equivocado dónde buscar...

-Tu nombre será Romo, no te preocupes por nada, yo te cuidaré.

martes, 26 de junio de 2018

La Calle del "campito" y los "banquitos"

Entre un café y un cigarro,en un día de descanso, abro la ventana y me transporto a una mesa de escritorio y un cuadernillo de vacaciones.

Podría ser cualquier día en tres meses unos 20 años atrás.

Me pongo unas calzonas, camiseta, botines y me voy al porterillo del bloque de enfrente.

- ¿Está Juan?
- Espera.
- ¿Si?
- "Killo, bájate y coge el balón".

Y así comenzaban los día de verano sin más preocupación que meter todos los goles posibles.

- Me voy al "campito" mamá.
- Vale, a la hora de comer aquí.

Un campo de albero, una fuente de agua caliente y las rodillas "echadas abajo" era el resultado de los días más felices.

Una tortilla con cebolla y una fuente de Gazpacho con hielo, el premio a mediodía. El ruido de un aire acondicionado de pared haciendo retumbar las paredes y una siesta para evitar las horas de calor.

Una tarde de vuelta al "campito", y un "banquito" que ni los mejores platós de programas deportivos.

- Vamos a hacer el anuncio de Nike.
- "Enga", Yo soy Roberto Carlos.
- Tú ponte allí que eres Ronaldo.

Y al llegar la noche un "poli-ladron" por el barrio.

3 meses, que empiece la función, la felicidad está en esos pequeños momentos, Séanlo...

viernes, 14 de octubre de 2016

Calle de la salida

Toca la hora, normalmente la 1 de la tarde y el deseo de salir, desquitarse de todo. Pero, ¿Qué es realmente la "salida"? (No,  no es tu prima) simplemente se trata de posponer lo que viene al día siguiente.

Sales, te paras y te tomas algo con algún amigo o solo, depende de la disponibilidad de cada uno o la tuya misma, y te sumas en un ciclo que te lleva a comer y sofá porque te levantas demasiado temprano y el cuerpo merma tus ganas de comerte esos días. Luego a las 8 ya te entra "esa cosa" porque has de levantarte temprano para estar lo más óptimo a las 4 ó 5 de la mañana.

Es entonces cuando te viene a la cabeza esos años que no tenias que ganar dinero, el tiempo que empleaste en tu aprendizaje y que el reloj sonaba a las 7 u 8 de la mañana para ir con tus amigos a echar unas 5 ó 6 horas, sentado en un pupitre y echando de los mejores momentos de tu vida hacia fuera. Y digo hacia fuera, porque te centras en ser mayor, en tener dinero, en ser dueño de tus decisiones y tus problemas. Pero claro, entonces no sabes "¿Qué es ser adulto?".

Que fácil se ven las cosas desde una perspectiva donde "todo es de color"... donde cada fallo no repercute en tu cabeza, donde alardear de las estampitas que tienes no es de criticar, donde no tienes el miedo a ponerte malo o a lesionarse haciendo deporte. (Lo guay que era llevar una escayola).

Cada cosa a su tiempo, y como sigo siempre, si tienes menos de 30, eres un niño. Disfruta, sé feliz y haz cambios, aún estás a tiempo.



jueves, 13 de octubre de 2016

El bar de mi calle.

El Bar.

Gente pa'rriba y pa'bajo, alegria, tristeza, ignorancia, amores, desamores, vida, infierno...

Son tantas las palabras para describir ese pequeño rincón que es difícil que te quedes indiferente al estar en uno de ellos.

Mas allá de lo citado, me encuentro tomando café y en la mesa de al lado  una de las personas intenta tomar de la mano a la otra y esta demostrando su rechazo. He llegado y como cada tarde he pedido mi café, desde que ha llegado esa persona he sentido su tristeza. Con sus dos Coca Colas estan sentados hablando, el intenta buscar su mirada y sus manos recibiendo la negativa de ella...

Un rato después de él hablarle e intentar encontrar acomodo en su mirada este se lanza hacia su boca, la besa con la sorprendente aprobación de ella y las lagrimas recorren las mejillas de ambos, sonrien y esa mirada perdida encuentra sentido entre sus ojos.

A 1,10€ señores... acabo de presenciar una historia mu bonita a 1,10.

Calle larga

Cuatro años han pasado desde que creara este blog, como corre el tiempo.

Hoy vuelvo a lo que me gusta, a refugiarme en mis palabras, a decir tal como me siento y pienso. En cuatro años cambian mucho las cosas, aunque las hay que siguen estando ahí, ya sean guardadas o presentes.

Hoy no quiero escribir nada con la rabia que ya me conocen, no. Hoy me gustaría escribir lo positivo de estos cuatro años.

En esos tiempos me sumía en mis rabias que solo tenia agallas de expresar por estas líneas. Hoy, cuatro años despues, he aprendido a escuchar Thunderstruck por ejemplo, o me he casado, o no vivo en Sevilla tal y como pensaba. Todo ha cambiado positivamente hablando, aunque siga escuchando la misma música de antaño y siga siendo el mismo rancio.

El niño no se ha perdido, sigue en mi sombra, oculto cual duende de graciosa figura en un mundo de fantasía hecho dentro de mi cabeza.

Mis ideas brotan, también la ilusión, la vida es bella... la vida no es más que como la pintes, cuanto quieras emocionarte y complacer a tu corazón. Yo lo he conseguido, no en todas mis facetas, pero en cuanto a importante se refiere cuando empiezas a vivir TU VIDA, se podría decir que he empezado a jugar.

Tengo mil resquemores, puesto que no he alcanzado el tope a mis retos, si no que tipo de vida me continuaría ¿verdad?

Claro que si, siempre hay algo por lo que luchar, y cuando el último aliento de vida te alcanza, aún faltan cosas por hacer y decir. Por eso, en mi vuelta después de estos años que tanto la vida cambia, solo quería deciros que siempre ante una tiniebla, túnel o pozo del que crees no saldrás, siempre estará una maravillosa sonrisa como la de "RISON" convertida en cuerda para salir y valorar las cosas que en verdad han de importar.

Buenas noches y buen día.

lunes, 18 de junio de 2012

Nunca Jamás...






La calle de mi infancia... La calle de los sueños, la calle que has de recorrer, la calle de tu cuento por escribir, la calle de la felicidad, allá donde empiezas a recorrer tu vida; la calle de la ignorancia, calle de los deseos, calle llena de "árboles y de pájaros" que no dejan ver mas allá.


Es ahí donde todo empieza, donde ni te das cuenta y ya poco puedes hacer, pues todo ha pasado, y sin mas te das cuenta que el reloj ya no vuelve atrás, dejas de vivir en el Pais de Nunca Jamás, para verte inmerso en una sociedad donde te pisan, agreden, destrozan, consuelan, ayudan, e incluso a veces te enriquecen. Una calle llena de adoquines mas altos o mas bajos, que te hacen tropezar una y otra vez hasta el punto que, no te das cuenta que te has caido una vez mas. Esa calle que te adormece, que te droga para no ver mas allá de la cruda realidad,


Ahí es, cuando empiezas a recordar y añorar, que bajabas despues de hacer los deberes a la calle, sin preocupaciones, para jugar y jugar, hasta que tu madre te llamaba "que era tarde y a dia siguente tocaba madrugón", y bendito madrugón. Es aquí donde realmente la felicidad es ilimitada, no te enteras de na´, solo que te gusta una niña o que yo que se cuando tienes un examen y vas a estudiar el dia antes...


Pues bien, todo ha cambiado, todo está consumado, y la forma que pensabas que eran las cosas, ahora, ni la mitad. Ahora tus palabras si tienen consecuencias, ya no puedes pasarte el dia jugando, ahora no quieres crecer mas, ya no volverás a ser un niño, solo podrás ser "un niño perdido", ya que siempre querrás volver a serlo, o incluso lo serás, pero atrapado en un cuerpo que te obedece menos, que tiene obligaciones y que solo irá a peor.


Por todo esto, siempre quedará esa calle, la de tu infancia, la que te transportará por unos segundos a ese niño atrapado que no volverá a salir, que sin querer, creció.